En un lugar de Palma, de cuyo nombre muy bien nos acordamos… Esta es la historia de un joven muy sagaz que, tras la apertura de un primer hotel en Palma de Mallorca ahora ya hace más de 60 años, fundó lo que acabaría siendo la compañía hotelera más grande de España. Actualmente, Meliá Hotels [...]
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Las Cuevas del Drach, un clásico de Mallorca
Las Cuevas del Drach son un “must” en todo viaje a Mallorca. Son una visita obligada, sea cuando sea. No hay excusa para no conocer uno de las maravillas de la naturaleza de Mallorca, quizá la más conocida junto con la Sierra de la Tramuntana.
Situadas en Manacor, la naturaleza ha querido premiar a este municipio mallorquín con un tesoro como las Cuevas del Drach.
En realidad, cuando hablamos de las Cuevas del Drach nos estamos refiriendo a la unión de cuatro grandes cuevas, todas ellas del periodo miocénico: la Cueva de los Franceses, la Cueva de Luis Salvador, la Cueva Blanca y la Cueva Negra. Juntas alcanzan una longitud de casi 2,5 km y una profundidad de 25 metros, y además albergan en su interior al Lago Martel, considerado como uno de los lagos subterráneos más grandes del mundo.
La visita a las Cuevas del Drach, no guiada, suele durar una hora y media aproximadamente. Y se divide en dos partes: una primera de recorrido de diferentes cavidades, sales y observación de estalactitas, entre otros, y una segunda parte conocida como “El concierto”, que se desarrolla en el Lago Martel y que consta de una combinación de luces con música clásica. Concluidas estas dos partes, siempre está la opción de recorrer las cuevas en barca. A elección de cada uno.
Dado que se trata de uno de los emblemas turísticos de Mallorca, a la hora de visitar las Cuevas del Drach conviene tener muy en cuenta varias cosas, sobre todo dos: la época del año y la hora del día. Ambos factores pueden ser determinantes, pues sobre todo en verano y en fechas significativas las cuevas suelen registrar un alto volumen de visitantes.
Sólo cierran el 25 de diciembre y el 1 de enero. El resto del año permanecen abiertas a la visita con diferentes horarios: de noviembre a marzo ofrecen cuatro pases: 10:45 hrs., 12:00 hrs., 14:00 hrs. y 15:30 hrs.; y de abril a octubre unos cuantos más: 10:00 hrs., 11:00 hrs., 12:00 hrs., 14:00 hrs., 15:00 hrs., 16:00 hrs. y 17:00 hrs.
Dicho esto, otro motivo para viajar a Mallorca y disfrutar de su naturaleza para apuntar en la agenda…y van unos cuantos ya…
En Escapadas Vibo Viajes| La belleza tranquila de Valldemossa
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La belleza tranquila de Valldemossa
Valldemossa es un encantador pueblecito medieval a 17 kilómetros de Palma, ideal para un excursión de un día. Tranquilo (tiene unos 2.000 habitantes), es sede de una Cartuja construída en el siglo XIV y que fue residencia real de los regentes de Mallorca antes de ser cedida a la Iglesia.
La Cartuja está al pie de la Sierra de la Tramontana y nos ofrece una vista preciosa con las montañas al fondo. Durante el invierno de 1838/40, la pareja de artistas Chopin-George Sand residieron unos meses en una celda monacal. Fruto de esta estancia fueron los Preludios Op. 28 del músico y un libro (Un invierno en Mallorca) en que la escritora francesa deja bastante mal parados a los lugareños. A pesar de todo, se sigue celebrando entre sus paredes el Festival Chopin de Valldemossa. La visita también incluye también el Palacio del Rey Sancho.
Desde el pueblo también salen varias rutas panorámicas por la naturaleza. Destaca el Puerto de Valldemossa, a seis kilómetros del pueblo. Consiste en una hermosa caleta natural de aguas transparentes bien abrigada del mar. La parada a degustar el pescado local es casi obligatoria. Está además, detrás del Valle de Sa Marina. Dar un paseo para ver las cascadas de Rei de Teules es una buena forma de pasar la tarde y culminarla con belleza natural.
Más información | Real Cartuja de Valldemossa
Más información | Valldemossa (folleto)
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¿Has visto Mallorca desde el cielo?
¿Has pensado alguna vez en ver la isla de Mallorca desde el cielo? Para muchos esta actividad es la única manera de ver el mundo, desde arriba, a vuelo de pájaro. Ahora puedes hacerlo de la mano de Paragliding-Mallorca, una empresa ubicada en Puig de St. Marti, al norte de la isla.
Es uno de los lugares más importantes para practicar parapente y está cercano a Alcudia y desde ahí podrás disfrutar de unas vistas espectaculares de la bahía de Alcudia, el puerto de Pollença y las playas cercanas.
Si las condiciones meteorológicas lo permiten, Paragliding-Mallorca te ofrece diariamente desde el Puig de St. Martí, vuelos biplaza y, si así lo deseas, tus familiares y amigos también podrán estar presentes durante el despegue y el aterrizaje para inmortalizar el momento. La empresa asegura ser apta para todo tipo de clientes y de todas las edades, desde adolescentes hasta personas ya jubiladas o con limitaciones físicas.
Realizar un vuelo en biplaza te permitirá experimentar la sensación de libertad al volar con la ayuda de un piloto experto. La empresa asegura que todos sus pilotos son expertos instructores con más de 10 años de experiencia y que cuentan con todos los permisos y seguros en regla para poder realizar vuelos biplaza.
Los vuelos en parapente suelen tener una duración de 20 minutos, pero, si las condiciones lo permites, y con el consentimiento previo del piloto, existe la posibilidad de hacer vuelos más largos. Son muchos los que se sorprenden de la tranquilidad que experimentan durante el vuelo después de la descarga inicial de adrenalina que se produce tras el despegue.
Recuerda que para realizar un vuelo en tándem, con un parapente biplaza, conviene disponer, al menos, de 2 o 3 horas de tiempo, ya que aparte del vuelo hay que tener en cuenta el tiempo de desplazamiento necesario para llegar al Puig de St. Martí, así como la posible espera, una vez allí, hasta que el viento sea favorable para el despegue.
Una experiencia única si viajas a Mallorca que no te podrás perder y solo apta para atrevidos.
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